Desde chico tengo una admiración por la historia de Cuba. No voy a negarlo. Pero una cosa eso y otra cosa es justificar lo absurdo. No soy de los ciegos que dejan de pensar cuando se embelesan con algo. Hay que ser críticos siempre . Es la mejor forma de avanzar y mantenerse vivo.
La historia de Yoani Sánchez, la bloguera más popular de Cuba, es de cuento. Esta bloguera escribía, revolvía opiniones en todo el mundo (sobre todo en el hispano) y creaba espacios de debate más allá de la represión política cubana. Cada post suyo acumulaba cerca de 900 comentarios (últimamente más) y su éxito en la blogósfera mundial hoy ya es indiscutible. Esto le valió el Premio Ortega y Gasset de Periodismo Ciudadano que otorga el Diario El País (uno de los mejores en mi opinión) y el puesto #31 en la lista de los Personajes más influyentes del mundo de la Revista Times... nada mal ¿eh?
Lo absurdo se dió hace unos días cuando tras sortear la maraña burocrática cubana, Yoani no logró conseguir el permiso para salir de Cuba para recibir su premio en Madrid. Su frustración reflejó en varios posts de su blog y en los más de 1000 comentarios por post. Pierde el Gobierno Cubano pues muestra de frente su falta de apertura y su censura y pierde de ganar un ícono nacional que podría haberle servido para abrir ventanas en vez de cerrarlas.
Sin embargo, el final de la historia no es triste ya que, a pesar de no haber podido celebrar como hubiera querido su premio, la filóloga de 32 años es rotundamente contundente: No importa si mantienen retenido mi pasaporte. Desde hace un año tengo otro que en el acápite de nacionalidad exhibe una breve palabra: “blogger”.
Lo absurdo se dió hace unos días cuando tras sortear la maraña burocrática cubana, Yoani no logró conseguir el permiso para salir de Cuba para recibir su premio en Madrid. Su frustración reflejó en varios posts de su blog y en los más de 1000 comentarios por post. Pierde el Gobierno Cubano pues muestra de frente su falta de apertura y su censura y pierde de ganar un ícono nacional que podría haberle servido para abrir ventanas en vez de cerrarlas.
Sin embargo, el final de la historia no es triste ya que, a pesar de no haber podido celebrar como hubiera querido su premio, la filóloga de 32 años es rotundamente contundente: No importa si mantienen retenido mi pasaporte. Desde hace un año tengo otro que en el acápite de nacionalidad exhibe una breve palabra: “blogger”.
No queda más que admirar, apoyar y difundir.
foto: el reportero digital
3 comentarios:
Objetividad cuando menos, una cosa es la política migratoria de Cuba hacia sus subditos o compatriotas y otra ser un periodista digital influyente en un lugar tan célebre como la isla, y vaya que da lugar para toda polémica, como la dizqué libertad de expresión.
Si, "Generación Y" es un blog objetivamente peridístico. Contrario al periodissismo al que te refieres lineas más arriba. Refleja las sombras y luces, las contradicciones del último país que se mantiene firme con el socialismo.
Untimadamente se han suscitado varias modificaciones las cuales comenzaron con el ascenso de Raul Castro. Los cubanos ya tienen la posibilidad de alojarse en establecimientos de hospedaje en su país, asimismo comprar computadoras improtadas de China. Claro, no cualquiera puede acceder a todo esto ultimo debido al valor de la moneda cubana.
En definitiva Cuba merece amplia discusión. Hay avances muy importantes de la revolución, pero asimismo grandes hipocresías.
- David, definitivamente un error cubano.
- Alexis, hay mucho qué discutir en Cuba.
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